Los parques tecno-científicos se conciben como instrumentos de política de ciencia, tecnología e innovación (CTI) regional, para fomentar el crecimiento económico, bajo la triangulación del gobierno, la academia y las empresas, los cuales muchas veces desconocen las capacidades socio-territoriales existentes. Ello dificulta que estos instrumentos cumplan la función de crear y dinamizar redes de conocimiento, especialmente, en los países periféricos, donde los parques han reproducido el fenómeno de la emulación de políticas de CTI diseñadas por los países del centro, conduciendo a resultados poco alentadores y aún fracasos en su implementación. Este trabajo analizó el papel que cumplen estos dispositivos en las regiones donde se hallan instalados, considerando que en América Latina han tomado auge en las agendas de política subnacionales. Para tal fin, seleccionamos aquellos parques más consolidados en México y Colombia, ubicados en las regiones de Yucatán y Santander, respectivamente. La investigación se basó en un estudio de casos en perspectiva comparada, e indagó sobre el tipo de capacidades territoriales previas que dieron origen a ambos parques, y las trayectorias de las capacidades interactivas y las redes de conocimiento que se han dinamizado durante su operación. Los hallazgos demostraron que la sostenibilidad de ambos proyectos se sustenta en las capacidades territoriales interactivas, previamente creadas por los actores regionales. Sin embargo, el esquema vertical y jerárquico en el diseño de políticas de CTI, invisibiliza las sinergias territoriales, inhibiendo el rol desempeñado por los parques, que se limita a robustecer la infraestructura científica y tecnológica, sin alentar la vinculación intersectorial.